
Altos mandos militares de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón exigieron este viernes a Corea del Norte poner fin a todas las actividades ilegales que amenazan la seguridad regional.
La exhortación se produjo mientras aeronaves de combate avanzadas de las tres naciones realizaban maniobras conjuntas como muestra de fuerza dirigida a Pyongyang, de acuerdo con las autoridades, el ejercicio incluyó la participación de un bombardero estadounidense B-52H con capacidad nuclear, desplegado sobre aguas internacionales cerca de la isla surcoreana de Jeju.
Durante una reunión regular celebrada en Seúl, los jefes de los estados mayores conjuntos de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón debatieron sobre el envío de soldados norcoreanos a Rusia para apoyar la guerra en Ucrania, así como la posible transferencia de tecnología militar rusa a Corea del Norte.
“Instaron a la RPDC a cesar de inmediato todas las actividades ilegales para desestabilizar la península de Corea, la región Indo-Pacífico y más allá, y se comprometieron a seguir trabajando juntos para responder a las amenazas de la RPDC”, declararon los tres mandos en un comunicado conjunto, usando las iniciales de la República Popular Democrática de Corea.
En paralelo, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, tenía previsto iniciar este mismo viernes una visita oficial a Corea del Norte, en medio de la creciente cooperación militar y económica entre ambos países. Según medios estatales rusos y norcoreanos, Lavrov realizará una gira de tres días como parte de la segunda ronda de diálogo estratégico con su homóloga norcoreana, Choe Son Hui.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zakharova, confirmó que el encuentro anterior entre ambos ministros se celebró en Moscú en noviembre pasado.
Durante el último año, Corea del Norte y Rusia han fortalecido significativamente sus lazos, con el envío por parte de Pyongyang de armamento y soldados a Moscú, a cambio de asistencia económica y militar. Las autoridades de Seúl, Washington y Tokio expresan su preocupación por la posibilidad de que Rusia transfiera a Corea del Norte tecnología avanzada que pueda fortalecer sus programas de misiles y armas nucleares.
Los jefes del estado mayor conjunto Kim Myung-soo de Corea del Sur, Dan Caine de Estados Unidos y Yoshida Yoshihide de Japón discutieron diferentes medidas para reforzar su cooperación, con el objetivo de garantizar la paz y la estabilidad en la región, según detalla el comunicado oficial.
En los últimos años, Corea del Sur, Estados Unidos y Japón han venido ampliando y reanudando sus ejercicios militares conjuntos, con el fin de responder al creciente arsenal nuclear de Corea del Norte. Pyongyang, por su parte, considera estas maniobras como preparativos para una invasión y suele reaccionar con el lanzamiento de misiles.