Pasadas las seis de la mañana del día de ayer, el estruendo de las maquinarias pesadas despertó a los comunitarios de la calle Orlando Martínez del barrio Las Lilas en los Tres Brazos de Los Mina, Santo Domingo Este, mientras destruían varias casuchas con el fin de liberar espacio y sanear los alrededores del río Ozama, una medida dispuesta por el gobierno a través de la Unidad para la Readecuación de Barrios y Entornos (Urbe). Los afectados, entre ellos propietarios de viviendas, insistieron en que el desarrollo de la zona no puede hacerse sobre la base de la desigualdad, al ser indemnizados con un monto inferior al valor de sus viviendas.
Mientras algunos inquilinos consultados alegaron ser trasladados a otras zonas sin aún recibir el pago, hecho que ha generado gran malestar e indignación en el entorno, ya que los moradores no tienen los recursos suficientes para comprar o construir otra vivienda.
Uno de los casos es el de Maribell D’Oleo, quien fue propietaria de una vivienda durante 20 años pero no ha recibido el pago de los RD$150 mil correspondientes. Se quejó, con lamentación, que no se reconozca el verdadero valor de su hogar al definir el monto como muy mínimo. Ramon Acosta dijo que fue notificado de ser desalojado, pero aún no tiene un acuerdo monetario. Con 40 años viviendo en el lugar pidió recibir el dinero necesario para poder vivir en otro lugar. Nurys Jaquez, también propietaria con más de 20 años, dijo que fue notificada, pero sigue en espera de recibir el monto que merece su edificación.
Otros residentes en la zona alegaron que no han querido firmar, al señalar que sus propiedades valen más que la tasación que hacen las autoridades. Es lo que explicó Erasmo Ogando, al indicar que las autoridades deben tener más conciencia y pagar lo que valen las casas, así como también considerar a los que no tienen empleos y se sus tentaban de los alquileres en la zona.
2N6A1461Desalojo en la Lila. Hoy/ Arlenis Sastillo
Los desalojos, según señalaron los residentes en la zona, continuarán hasta liberar los espacios que buscan rescatar una longitud aproximada de 1 kilómetro en la ribera del río Ozama en el municipio de Santo Domingo Este.
