El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) mediante su Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, condenó el abandono gubernamental por el colapso ambiental que vive el Gran Santo Domingo, tal como es comprobado con la contaminación del río Isabela y el Ozama.
Alfonso Ureña, titular del organismo, explicó en rueda de prensa, que el agua contaminada que fluye en los caudales de ambos está cargada de olores fétidos y de burbujas inquietantes acarreando un proceso de degradación ambiental profunda.
Señaló que la denuncia la han manifestado los pescadores y comunitarios de ambas zonas desde hace años, ya que ha afectado la pesca y la salud de sus habitantes pero aún siguen esperando soluciones.
Al hablar en la actividad realizada en la Casa Nacional del PLD, Ureña denunció también como el Gobierno abandonó la ejecución del Plan Maestro de Alcantarillado Sanitario del Gran Santo Domingo, especialmente el subsistema La Zurza-Mirador Norte, que estaba diseñado para interceptar y tratar las aguas residuales antes de que llegaran al Isabela.
Además denunció el vertido ilegal de escombros en los Humedales del Ozama, con participación de vehículos oficiales de la Alcaldía de Santo Domingo Este, operando a plena luz del día y ante la mirada indiferente de las instituciones que deben hacer cumplir la ley.
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Por las problemáticas, Ureña exige al Gobierno garantizar la protección efectiva de los humedales y riberas del Ozama, con la detención y sanción inmediata de rellenos ilegales, en se sentido, pidió reactivar el programa de saneamiento de cañadas que descargan directamente en el Ozama e Isabela, iniciado durante los gobiernos del PLD.
Insistió en la implementación del Plan Maestro de Alcantarillado Sanitario del Gran Santo Domingo, con prioridad en el subsistema La Zurza–Mirador Norte y la restitución y ampliación del presupuesto público ambiental para la reducción de la contaminación, saneamiento ambiental y disposición de aguas residuales.
El PLD reiteró su compromiso de estar justo al lado del pueblo dominicano, defendiendo las mejores causas sociales y ambientales al alegar que las promesas de saneamiento sigan ahogándose en la inacción gubernamental.
